victoria

jueves, 14 de febrero de 2013

Voces nocturnas


Un señor viejo que era muy bueno, una noche en la que ya estaba acostado, empezó a oír una voz que lloraba, se guió por ella y llegó hasta un viejecito que estaba acostado en un portal, se lamentaba porque hacía mucho frío, y entonces el señor que era tan bueno lo llevó a su casa para que durmiera allí, y por la mañana lo llevó al hospital porque se había puesto enfermo de dormir en los parques y en los portales.

Al señor, todas las noches siguientes le pasaba lo mismo, cuando ya se iba a costar o ya estaba acostado oía alguna voz lamentándose o llorando y la "tenía" que seguir y ayudar a la persona.

Estos son tres finales distintos para la historia:

Primer final: aquel señor era muy bueno, pero empezó a ponerse nervioso porque no podía dormir nunca, decidió ponerse unos tapones en los oídos todas las noches para no escuchar nada, y, después de un mes dejó de ponérselos y ya no escuchaba las voces, lo que no sabía era si es que se había quedado sordo o nadie lloraba.

Segundo final: una noche hubo un robo en el edificio en el que él vivía y le echaron la culpa, el decía desesperado que no había sido, pero los vecinos le preguntaron que entonces donde había estado las noches anteriores y, claro el decía que había estado ayudando en Argentina a un campesino, que no conseguía encontrar su vaca...Pero no le creyeron y tuvo que vivir el resto de su vida en la cárcel escuchando las voces lamentándose y no pudiendo salir para ayudarles.

Tercer final: que en toda la Tierra haya un día en el que nadie llore y el señor pueda dormir en paz, ese día quizá se haga realidad, pero el viejecito ya no estará.

A mi me gusta más el primer final, porque acabaría mejor de esa manera.

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